foto de La Gaceta.
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Después de un comienzo prometedor, gol mediante a los 4 minutos del Pulga Rodríguez, el Decano fue cediendo terreno mientras promediaba el primer tiempo. A pesar que se pudo aumentar si no fuese por la lamentable labor de este ya conocido arbitro Pablo Díaz, quién manipuló el encuentro a su antojo, no cobró un penal a favor de la visita y cobró off side en dos jugadas en que los delanteros del Deca se iban solos camino al gol. Es el mismo que nos acorraló en Santa Fe contra Unión (yo no me explico como nos pudo dirigir en aquella ocación un Santafecino en un partido contra Unión...en fín).
Cuando todo parecía controlado de parte del decano, vino esa falta emn las puertas del área del arco defendido por Lucas Ischuk, y Román Díaz, de notable actuación, la puso como con la mano, al mismo palo de Lucas, que no tuvo nada que hacer, el disparo fue tan rápido, que no dio tiempo a la reacción del 1 Decano.
En el segundo tiempo, Almagro hizo mucho mejor las cosas, y aún así, a falta de nueve minutos recién pudo quebrar al portero tucumano.
Esto recién empieza, y Rivoira sabe lo que hace.
A esperar hasta el jueves y hacer explotar el Monumental. Como siempre.
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