
(Foto HECTOR PERALTA para La Gaceta)
En un partido raro (empezó ganando a los 9'), donde el decano entró o pareció ingresar con el pie derecho, cayó en condición de local por 2a3.
La figura fue Emanuel Trípodi, el arquero del conjunto sureño, pero eso no certifica que el Decano jugó mejor o mereció alzarse con los tres puntos, no.
Atlético tuvo casi diez oportunidades para convertir, pero a decir verdad, solo marcó dos, uno de zapallazo, porque el disparo de Lujambio iba a ser contenido por Trípodi, es más, lo contuvo, el línea esta vez nos favoreció y corrió por la línea de cal buscando el medio campo...y otro de tiro libre por la mágica pegada del Capé.
No, Atlético tuvo más o menos diez posibilidades, pero fue con suma torpeza, fueron manotazos de ahogado, fue lo mismo que con Instituto, fue un manojo descontrolado de ataques sin un norte.
Rivoira no es un delincuente, se pasaron los que dejaron ver su bronca, pero hasta aquí no ha estado a la altura, si bien, no es un desastre la campaña, pero en Atlético siempre hay que salir a matar, aunque se muera, pero hay que salir a matar. Atlético no es un club común, es un grande, no basta con ganar, hay que dejar todo y más. Aún jugando en el Argentino o en la Liga o en el Nacional, Atlético ha sido siempre protagonista, siempre. Y ha descendido por las torpezas de una conducción, o de un miembro de aquella conducción. Pero Atlético siempre ha ido y debe ir al frente.
Rivoira es inteligente, es un gran DT, tiene laureles que lo acreditan, pero ha ascendido con un sistema mezquino en ambas oportunidades, solo hace falta recordar aquellos últimos minutos -Chacarita de local- en donde acabaron con la cola entre las piernas, porque aquel Atlético de Zucarelli lo quizo, ¿hace falta recordar el mano a mano sobre el final de Bustos?...
En Atlético no se apueba esa manera, en 25 de Mayo y Chile suele haber siempre no menos de 20.000 espectadores, en Chacarita no, en Instituto tampoco, con el aguante basta en esos clubes, en Atlético no.
Rivoira sabrá hacer lo que deba hacer, repito, es inteligente, y se sabrá dar cuenta a tiempo que esto es Atlético.