El aerosol


(Foto La Gaceta)

Cuando el árbitro sacó el aerosol de la cintura y trazó la línea blanca, donde debía formarse la barrera de Chacarita, se presentía que si el "capé" Sarría estaba inspirado podía ser el empate de Atlético Tucumán, en la cancha que Ferrocarril Oeste posee en el barrio de Caballito, y en donde hace de local el club tricolor hasta que refaccionan el estadio de calle Gutierrez Nº 351 en Villa Maipú, San Martín.Y fue así nomás... Como si realizara un pase al arco, el capé la colocó "en el rincón de las ánimas" como decía el relator Antonio Caffarelli, lejos del arquero funebrero Tauber.No fue malo el invento del aerosol para los árbitros. Al fin y al cabo es una protección contra la especulación y la avivada de las barreras que como hormigas van adelantándose, y ganan distancia frente al pateador. Estuvo cerca el decano, al final,cuando el reemplazante Pereyra desperdició una clara habilitación con la defensa del funebrero totalmente desarticulada. Para destacar: el impecable césped del estadio ferroviario.Para mejorar: el grupo electrógeno del estadio se vió colapsado y ante un corte de energía demoró 30' el desarrollo del partido.

Bernardo L.
(corresponsal)